Por Juan Pablo Ojeda
A partir del 1 de enero de 2026, cargar gasolina y otros combustibles en México tendrá un ajuste fiscal, luego de que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público confirmó el incremento al Impuesto Especial sobre Producción y Servicios, conocido como IEPS. No se trata de una decisión discrecional ni de un nuevo impuesto, sino de una actualización anual prevista en la ley para ajustar las cuotas conforme a la inflación.
El acuerdo fue publicado este lunes 22 de diciembre de 2025 en el Diario Oficial de la Federación y establece nuevas cuotas para gasolinas, diésel y combustibles fósiles. En el caso de las gasolinas automotrices, la Magna tendrá un IEPS de 6.7001 pesos por litro, la Premium de 5.6579 pesos y el diésel de 7.3634 pesos por litro.
El ajuste también alcanza a otros combustibles como el propano, butano, gasavión, turbosina, combustóleo y distintos tipos de carbón y coque, con cuotas que van desde centavos por litro hasta montos por tonelada, dependiendo del producto y su contenido de carbono. Hacienda precisó que estas cuotas buscan mantener actualizado el impuesto sin perder poder recaudatorio frente a la inflación.
Para los estados, el llamado IEPS estatal también se actualizará. A partir de 2026, las entidades federativas recibirán 59 centavos por litro de gasolina Magna, 72 centavos por litro de Premium y 49 centavos por litro de diésel, recursos que suelen destinarse a infraestructura y gasto local.
Aunque el ajuste es técnico y automático, su impacto suele sentirse en el bolsillo de los consumidores, especialmente cuando se combina con variaciones en el precio internacional del petróleo y el tipo de cambio. Por ahora, Hacienda no ha detallado si en 2026 se mantendrán estímulos fiscales para amortiguar el efecto del IEPS en el precio final de los combustibles.
